A lo largo de mi vida personal y profesional he ido adquiriendo experiencia y aprendizajes que han guiado mi trabajo como psicóloga dedicada a la salud mental y el bienestar de la mujer.​

Mi desafío es ser una profesional competente y estar siempre actualizando mis conocimientos teóricos y técnicos en la psicología de la mujer, en sus distintas etapas de la vida, con los desafíos, tareas y expectativas que cada una de ellas tiene.​

Cada uno de los conocimientos y herramientas que he adquirido a través de magíster, cursos y talleres ha sido fundamental para comprender de manera integral las experiencias de vida de cada una de mis pacientes.​

Hace ya algunos años cursé un magíster en Adolescencia, el cual fue el punto de partida para enfocar mi carrera en la mujer y en cada una de sus etapas del ciclo vital.

La adolescencia es un cambio trascendental en la vida de nosotras, marca el inicio del despliegue del desarrollo biológico con la pubertad y la menarquia. De ahí hacia adelante una serie de cambios biológicos como la menopausia-climaterio, cambios psicológicos y sociales acompañarán a la mujer, marcando hitos trascendentales en su vida.

A lo largo de estas diferentes etapas, la mujer experimenta una serie de ciclos complejos de cambios que afectan su salud y bienestar.

La Psicología de la Mujer realmente me apasiona, junto con ello, hacer clases ha sido una experiencia enriquecedora. Ayudar también a otras mujeres desde mis conocimientos y experiencia a través de una fundación para la mujer ha sido una de las grandes satisfacciones que he tenido como persona y profesional.

Mi propia experiencia de vida ha sido también fuente de inspiración para dedicarme a mi profesión, buscando las mejores herramientas para ayudar a otros, así como cada una de mis pacientes es mi motor para trabajar junto con ellas en que logren alcanzar un estado de bienestar y salud mental en sus vidas.